(por Walter Alegre)
La cúpula de la Iglesia, salvada de la piqueta porque es sagrada, bendice las cópulas que suceden frente a ella.
La estación domina el otro frente y, como un cíclope de cemento, se traga a los hombres.
Entrambos están los que perdieron el último tren y no tienen a donde ir.
Los chipá paraguayos son devorados por sirenas dominicanas que son devoradas por centauros de cartón.
La jauría de las hienas se disuelve cuando una víctima cae para volver a juntarse.
Guerreros del África venden amariconadas bisuterías mientras las frituras de las disquerías dan el marco sonoro a esta cinta sinfín.
Algunos gringos sacan fotos a una Latinoamérica falsa pero real.
Y yo sigo al borde del andén esperando que llegue mi tren en la estación Constitución.
Algo de lo que se puede escuchar
Valeria Cini en concierto
Kicuchi y Pereyra: 2 artistas en el CCC
No hay comentarios:
Publicar un comentario